Del cielo a las abejas

ASTRONOMIA Y AGRICULTURA EN CAMPOS Y TÁBARA

El programa de innovación turística logra completar el número de inscritos para las actividades durante los meses de temporada baja

O. T. R. A. Zamora invitó el pasado fin de semana a los visitantes que utilizaron alguno de los establecimientos hosteleros adscritos al programa de innovación turística a acercarse a actividades tan dispares como la astronomía y la apicultura en los términos de San Agustín del Pozo y Ferreruela de Tábara.
La noche del sábado, día 9, mostró un cielo limpio, que se añadía a las magníficas condiciones que ofrece la comarca de Tierra de Campos para la observación astronómica por la nula contaminación lumínica, y quince visitantes pudieron disfrutar de estrellas y constelaciones de la mano de Joaquín Tapioles, más conocido como ‘el pastor galáctico’. “Antes de entrar en el observatorio les enseñé las constelaciones con un puntero láser verde que, para entendernos, es como una espada de la Guerra de las Galaxias, pero de un kilómetro de larga. Les expliqué un poco lo que podían ver a simple vista y se fijaron en planetas como Marte y Saturno”, explica Joaquín Tapioles. “Después, subimos en dos grupos y les enseñé cúmulos y galaxias. Los niños tenían menos paciencia pero logramos que se interesaran y se fueron encantados. De hecho, la gente dijo que querían venir con más tiempo por delante para poder ver las estrellas con detenimiento”, indica.
“La verdad es que fue impresionante. La noche fue un espectáculo, un auténtico lujo; el cielo, con luna creciente y las estrellas casi se podían tocar. Además, Joaquín siempre se emociona enseñando su cielo y sus ovejas como fondo del escenario le daban sentido total a su apodo”, comenta Antonio Campesino, coordinador de actividades de O. T. R. A. Zamora. “Estamos quedándonos impresionados al ver cómo en plena temporada baja las actividades se completan con facilidad. Tuvimos que hacer dos turnos para subir al observatorio. Creemos que estamos viendo un adelanto de lo que puede ser la primavera y el verano, ahora que el programa ya tiene implantación y el público cada vez lo conocer más”, añade.

La miel de la tierra de Tábara El domingo, día 10, una docena de turistas participaron en la actividad denominada con el sugerente epígrafe de ‘Miel y abejas’. La empresa familiar Libaflor, ubicada en el término de Ferreruela de Tábara acogió a los visitantes, que tuvieron la oportunidad de contemplar los colmenares, protegidos con la misma indumentaria que utilizan los apicultores profesionales, y de examinar por dentro una colmena, además conocer el proceso de extracción y envasado de la miel. “Les explicamos el comportamiento de las abejas y cómo es su hábitat. A los visitantes siempre les encanta ver el interior de una colmena. La gente se queda impresionada con las abejas, que parecen conocidas pero que impresionan mucho cuando te adentras en su mundo”, señala Manuel López, gerente de Libaflor. “La actividad fue tremendamente atractiva. Nos sorprendió la extrema limpieza de las instalaciones y que una empresa familiar en plenas tierras de Tábara pueda cuidar de esa forma el detalle. Eso lo valora mucho el visitante”, apunta el coordinador de actividades de O. T. R. A. Zamora. “Se veía gran calidad en todo lo que hacían y nos llevamos una sorpresa al descubrir la verdad sobre la jalea real, que no es eso que nos venden. Los participantes compraron miel y trozos de panal que luego te envasaban. Estoy seguro de que los turistas no van a volver a ver a las abejas de la misma forma”.
En este sentido, Campesino dice que “es para sentirse orgulloso ver que gente de nuestras comarcas apuestan por esta forma de vida, viviendo para, por y de la naturaleza y, además, con esta calidad y profesionalidad” y recalca que “para nosotros es toda una lección de cómo se puede vivir de forma sostenible”.
El programa O. T. R. A. Zamora avanza así en su séptimo mes de actividades y consiguiendo una gran implantación como alternativa al ocio y al turismo de interior en la provincia de Zamora. “Un fin de semana tras otro tengo que decir que me veo sorprendido por lo que veo y lo que descubro en estas tierras. Tengo la oportunidad de participar en actividades, conozco gente, escucho sus comentarios y me despido de amigos recién conocidos”, explica Campesino. “Cuando oigo o leo lo que se comenta o cómo se vende nuestra tierra soy más consciente de que lo que deberían hacer nuestros representantes es venir a conocer a estas gentes, lo que tienen, el cariño y la pasión que ponen en todo. Ésa es la otra Zamora, la de todo el año y la que sorprende de verdad a quienes se acercan a conocer nuestra provincia”. Asimismo, el coordinador de actividades de O. T. R. A. Zamora recuerda que “ahora vemos cómo se está animando a los promotores rurales, que dan ideas y se ilusionan con el futuro cercano, descubriendo qué es lo que desean los turistas; por eso estamos consiguiendo mover a mucha gente en temporada baja y eso significa algo”.