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lunes, junio 14, 2010

Las paradojas de un sector en crisis

EL FRACASO DE LA POLÍTICA TURÍSTICA DE LA JUNTA DE CASTILLA Y LEÓN
Ávila, Palencia, Soria y Zamora a la cola de España


El Turismo no marcha bien en la comunidad, en general y, especialmente, en provincias como Ávila, Palencia, Soria y Zamora, la situación es crítica. Las cuatro provincias ocupan los últimos lugares de España en los negocios hoteleros (Ver Datos).
Mes tras mes y año tras año, la Encuesta de Ocupación Hotelera del INE, nos viene a recordar la crisis endémica del sector turístico en Castilla y León. La comunidad sigue situándose en el último lugar de España en los datos más significativos: estancia media, empleo, establecimientos abiertos, viajeros, grado de ocupación por plaza….
Frente a estos datos, la Junta se refugia en los datos más óptimos del turismo rural, pero esto es sólo un espejismo, pues el turismo rural es utilizado sólo por una décima parte de los turistas que nos visitan.
Efectivamente, el 83,5 % de los viajeros que llegan a Castilla y León se alojan en hoteles; el 10, 8 % lo hace en alojamientos de turismo rural, mientras que el 5, 4 % lo hace en camping y no supera el 0,20 % los que se alojan en apartamentos.
El portavoz de Cultura y Turismo, José Ignacio Martín Benito, señala la “incapacidad de la Junta de Castilla y León para afrontar la crisis endémica del sector turístico en la comunidad, donde el sector no acaba de encontrar un hueco en el panorama turístico nacional”.
Un año después de estar en funcionamiento el Plan Estratégico de Turismo de Castilla y León –tras haber estado dos años sin él- el sector no sólo no despega, sino que se hunde todavía más y la comunidad sigue en caída libre.

Paradojas e Incumplimientos
Si la diversificación de la oferta y la estacionalidad son dos retos a combatir, las políticas de la Junta parecen remar en sentido contrario.
Siendo el patrimonio cultural uno de los principales activos del nuestro sector turístico, resultan paradójicas las campañas de la Junta de apertura de monumentos centradas sólo en determinados periodos, con “Abrimos en Semana Santa” o “Abrimos en verano”, en lugar de apostar por un “Abrimos todo el año”, como propone el PSOE y quiere el sector.
Por otro lado, “resulta también paradójico que estos programas inviten a visitar inmuebles declarados BIC, que están cerrados al culto, apuntalados y que amenazan ruina, como San Lorenzo de Sahagún de Campos (León) o Santa María del Castillo (Madrigal de las Altas Torres). No es esta, precisamente, la mejor tarjeta de presentación. No se puede invitar a los turistas a que comprueben y visiten el mal estado de nuestro patrimonio, a no ser que en la Consejería de Turismo se hayan infiltrado quintacolumnistas”, señala Martín Benito.
Otra de las paradojas es la despoblación en el mundo rural. Por un lado, la despoblación contribuye a la pérdida y al mal estado del patrimonio cultural –uno de los activos o recursos turísticos-. La falta de efectivos demográficos y ausencia de población joven limita las acciones de emprendedores en este sector. La paradoja reside en que el turismo puede contribuir a dinamizar y crear actividad económica en el mundo rural y, por consiguiente, a fijar o establecer población. Sin embargo, tanto el medio ambiente como el patrimonio cultural son sectores que cuentan con importantes activos que no están debidamente atendidos ni promocionados.
El procurador socialista resalta las contradicciones del gobierno autonómico, que dice apostar por el “turismo de Congresos”, pero a la vez, rema en sentido contrario. A este respecto, Martín Benito recuerda que el presidente Herrera ha estado haciendo constantes promesas que luego no ha cumplido. Y destaca, sobre todo, que Herrera ha prometido varias veces y en varias Ferias la creación de una Oficina de Congresos de Castilla y León, compromiso reiterado por la Consejera en su programa de legislatura. Promesa que, sin embargo, desapareció del Plan Estratégico de Turismo (2009-2013) y no se contempla tampoco en el proyecto de la nueva Ley de Turismo, como se ha abandonado también la promesa de poner en marcha una Tarjeta de servicios turísticos.
Añade Martín Benito que siendo el Turismo de Congresos una de las posibles fortalezas del sector, hoy por hoy es una debilidad. Soria, Segovia, Valladolid, León y Zamora, no tienen todavía palacio de Congresos. En Zamora, las obras están paralizadas y el de León queda muy lejos en el tiempo para su funcionamiento, pues se acaba de firmar el convenio muy recientemente.

Plan Renove
La crisis del sector turístico en Castilla y León exige tomar medidas desde la administración autonómica, tal como ha propuesto el PSOE en varias ocasiones. Conviene recordar que en el Pleno de las Cortes, el PP rechazó un Plan Renove del Turismo en Castilla y León. Los empresarios de la Federación de Hostelería de Castilla y León también lo han reclamado. Herrera no puede seguir dando la espalda al sector ni cruzarse de brazos para encarar la crisis y no olvidar sus promesas.

Los datos
Haciendo balance del último año conocido (2009), todos los indicadores reflejan la grave crisis del sector turístico en Castilla y León, situada en el furgón de cola de las comunidades españolas en el turismo de los negocios hoteleros.
Estancia media: Castilla y León tuvo una estancia media de 1,71, lejos del 3,24 de la media nacional, y por debajo de Castilla-La Mancha y La Rioja (1,79) y Extremadura (1,81).
Las provincias donde menos pernoctaciones se registraron en 2009 son todas de Castilla y León. Así, Ávila (486.704), Palencia (374.432), Soria (376.112) y Zamora (377.531).
En 2009, la comunidad castellana y leonesa presenta también los números más bajos tanto en establecimientos abiertos como en el número de plazas. De las cinco provincias españolas con menor número de establecimientos abiertos cuatro son de Castilla y León: Ávila (111); Palencia (99); Soria (111) y Zamora (90). Lo mismo sucede en cuanto al número de plazas: Palencia (3.524), Soria (3.599) y Zamora (3.348) son las últimas de España.
Los datos de 2009 de la E.O.H. confirman que Castilla y León es también la comunidad donde menos empleo generan los negocios hoteleros. De las cinco provincias españolas con menos empleo en el sector, cuatro son de esta comunidad: Ávila (599); Palencia (408); Soria (456) y Zamora (554).
Turistas extranjeros: es más, Palencia, Ávila, Zamora y Soria no llegaron ni a 50.000 los extranjeros que se instalaron en los hoteles de Castilla y León. Este desequilibrio en turistas extranjeros se ve claramente en los porcentajes de provincias como en Segovia, Palencia, Ávila, Soria y Zamora, donde no se llega al 7 % del total de la comunidad. Según el Boletín de Coyuntura Económica de Castilla y León, sobre movimiento de viajeros en la comunidad, que incorpora todo tipo de alojamientos (hoteles, campings, apartamentos, casas de turismo rural…), 1.082.075 de personas procedentes del extranjero visitaron Castilla y León. De estas en la provincia de Soria representó un porcentaje de un 2,32 %. En Zamora, el porcentaje de turistas extranjeros es de 3,42 %, mientras que en Ávila es de 5,02 %; Palencia contribuyó con el 5,63 %.
Según la Encuesta de ocupación hotelera, el número de viajeros nacionales en 2009, en provincias como Ávila (486.704); Palencia (374.432); Soria (376.112) y Zamora (377.531), es el más bajo de España.

Foto: La villa de La Puebla de Sanabria y torre del Caracol del Parador de Turismo de Benavente.

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