La destrucción irreparable del patrimono cultural
EL PSOE ABOGA POR UNA NUEVA POLÍTICA DE CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO
Martín Benito propone la creación de órganos de gestión territorial
El portavoz de Cultura y Turismo de las Cortes de Castilla y León, José Ignacio Martín Benito, mostró hoy su preocupación por la conservación del patrimonio cultural, en general, y arqueológico en particular.
A raíz de la destrucción incontrolada de necrópolis como las de Ucero (Soria) o Pintia (Valladolid), así como de los expolios que se suceden en otros yacimientos, el procurador considera que es preciso hacer una reflexión sobre la salvaguarda de los mismos.
Para Martín Benito, es preciso una mayor implicación de la administración, tanto en el ámbito educativo como turístico. A este respecto, señaló que es preciso coordinar políticas entre Cultura y Educación, con el fin de sensibilizar a la población de la importancia de los yacimientos arqueológicos y de lo frágil que resulta mantenerlos, si no se ponen las medidas adecuadas. Para el procurador no basta con la incoación o declaración de estos lugares como Bienes de Interés Cultural. Esta medida debe, a su juicio, ir también acompañada de políticas de conservación, de promoción y de puesta en valor.
No podemos proteger legalmente un yacimiento arqueológico y olvidarnos de él, dejándolo a merced del tiempo, sin que los habitantes del lugar sean los primeros en tomar conciencia de la importancia de lo que significa ese legado, así como de las posibilidades que pueden abrirse con la puesta en valor de esos recursos culturales, dentro de políticas de desarrollo rural.
Martín Benito critica el argumento que sostiene la administración autonómica cuando sostiene que la incoación es suficiente para la protección de un bien cultural. “La protección no puede estar sólo sobre el papel y olvidarse del bien, se necesita la creación de órganos de gestión de los recursos culturales de un territorio, donde estén representados la Junta, los ayuntamientos, los grupos de acción local y los agentes sociales y económicos”, señala el procurador. El representante socialista asegura que la gestión, la protección y la puesta en valor de los recursos culturales en el medio rural, debe partir desde el territorio, algo que los habitantes de un lugar sientan cercano y que perciban como un pilar de desarrollo económico, ligado al turismo cultural.
Por el contrario, se lamenta el procurador de la falta de eficacia de los servicios de la Junta, que actúan a posteriori, cuando el daño está hecho. “Se limitan a hacer el informe correspondiente, cuando no minimizan el daño causando o niegan la realidad, como sucedió en la necrópolis de Pintia”. Se echan de menos campañas de sensibilización, llevadas a cabo desde la administración”, indica Martín Benito. Para el portavoz socialista, la descoordinación entre la propia administración llegó al extremo de que, con motivo de la crisis de los topillos, la Consejería de Agricultura llegó a recomendar por su cuenta la arada profunda, sin discriminación y sin tener en cuenta a la Consejería de Cultura, ante la posible destrucción de los niveles arqueológicos.
Martín Benito propone la creación de órganos de gestión territorial
El portavoz de Cultura y Turismo de las Cortes de Castilla y León, José Ignacio Martín Benito, mostró hoy su preocupación por la conservación del patrimonio cultural, en general, y arqueológico en particular.
A raíz de la destrucción incontrolada de necrópolis como las de Ucero (Soria) o Pintia (Valladolid), así como de los expolios que se suceden en otros yacimientos, el procurador considera que es preciso hacer una reflexión sobre la salvaguarda de los mismos.
Para Martín Benito, es preciso una mayor implicación de la administración, tanto en el ámbito educativo como turístico. A este respecto, señaló que es preciso coordinar políticas entre Cultura y Educación, con el fin de sensibilizar a la población de la importancia de los yacimientos arqueológicos y de lo frágil que resulta mantenerlos, si no se ponen las medidas adecuadas. Para el procurador no basta con la incoación o declaración de estos lugares como Bienes de Interés Cultural. Esta medida debe, a su juicio, ir también acompañada de políticas de conservación, de promoción y de puesta en valor.
No podemos proteger legalmente un yacimiento arqueológico y olvidarnos de él, dejándolo a merced del tiempo, sin que los habitantes del lugar sean los primeros en tomar conciencia de la importancia de lo que significa ese legado, así como de las posibilidades que pueden abrirse con la puesta en valor de esos recursos culturales, dentro de políticas de desarrollo rural.
Martín Benito critica el argumento que sostiene la administración autonómica cuando sostiene que la incoación es suficiente para la protección de un bien cultural. “La protección no puede estar sólo sobre el papel y olvidarse del bien, se necesita la creación de órganos de gestión de los recursos culturales de un territorio, donde estén representados la Junta, los ayuntamientos, los grupos de acción local y los agentes sociales y económicos”, señala el procurador. El representante socialista asegura que la gestión, la protección y la puesta en valor de los recursos culturales en el medio rural, debe partir desde el territorio, algo que los habitantes de un lugar sientan cercano y que perciban como un pilar de desarrollo económico, ligado al turismo cultural.
Por el contrario, se lamenta el procurador de la falta de eficacia de los servicios de la Junta, que actúan a posteriori, cuando el daño está hecho. “Se limitan a hacer el informe correspondiente, cuando no minimizan el daño causando o niegan la realidad, como sucedió en la necrópolis de Pintia”. Se echan de menos campañas de sensibilización, llevadas a cabo desde la administración”, indica Martín Benito. Para el portavoz socialista, la descoordinación entre la propia administración llegó al extremo de que, con motivo de la crisis de los topillos, la Consejería de Agricultura llegó a recomendar por su cuenta la arada profunda, sin discriminación y sin tener en cuenta a la Consejería de Cultura, ante la posible destrucción de los niveles arqueológicos.
Foto: Abandono en el dolmen de Morales de Rey.
Etiquetas: Arqueología, Patrimonio
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