Artículo de opinión

EL DELFÍN, UNA NUEVA ESPECIE MUTANTE EN EL ECOSISTEMA SANABRÉS
Por Manuel Fuentes López *

Enamorado de Sanabria y de sus gentes como soy, con multitud de recuerdos imborrables de mis periódicas visitas a Sanabria desde que tenía 14 años, visitas a Trevinca, a pescar, a la recogida de castañas, y como lugar imprescindible para desconectar del mundo en mis vacaciones anuales en el camping el Folgoso, me duele sobremanera leer diariamente el artículo que escribe el señor Delfín Rodríguez sobre gentes de esa comarca a las que conozco desde hace muchos años y a las que siempre he reconocido como personas que han luchado y han defendido a su tierra en todos los foros en los que han coincidido conmigo, que son muchos. El señor Delfín debe reconocer que el odio que derrama cada línea de sus artículos está perjudicando a la comarca de Sanabria y a todos los Grupos de Acción Local de la provincia de Zamora y, me temo, que oculta intenciones que no se atreve a revelar.

Conozco a Felipe Lubián desde mi época como responsable provincial en el Programa de apoyo a las escuelas rurales de la provincia de Zamora y allí, en la Alta Sanabria, siempre fue un activo colaborador para crear escuelas nuevas en los pequeños pueblos, para enseñar la zona a todos los colectivos que quisieran visitarla, para participar en la creación de grupos de teatro, para fomentar jornadas de convivencia entre los niños de todos los pueblos, para acompañar a los niños en los juegos escolares en los que convivían con todos los participantes de la provincia, para crear un ambiente adecuado a todos los maestros que aterrizaban por allí, para dinamizar grupos de formación y para dotar de materiales didácticos innovadores a todas las escuelas de la comarca. Siempre estaba abierta su casa a todos los visitantes, nos enseñaba los juegos autóctonos, conseguía dinero para que los alumnos de la zona visitaran España y Portugal para conocer otras culturas y siempre transmitía que teníamos que estar orgullosos de la cultura sanabresa, mezcla de castellana, gallega, portuguesa y leonesa. Parecía el embajador de Sanabria en los círculos educativos y culturales.

Este hombre, con especial gracejo, con su pelo cano, siempre estaba allí, en Lubián. Vivía allí, trabajaba allí y a pesar de eso, siempre estaba bien informado y defendía en todos los foros a su pueblo y a las gentes de su comarca.

Años más tarde, cuando asumí la responsabilidad de la Secretaría General de la UGT. Zamora, continuaron mis contactos con Felipe Lubián. Sus llamadas siempre obedecían a problemas que había en la comarca para exigir la intervención del sindicato en defensa de los trabajadores o sobre necesidades de creación de empleo o infraestructuras en Sanabria.

Ahora, en mi etapa como procurador regional, Felipe es la voz de las reivindicaciones de los sanabreses en las Cortes de Castilla y León. Es un procurador que habla muy muy claro, que un día defiende el derecho a utilizar la lengua gallega en las escuelas y al día siguiente denuncia el mal funcionamiento de las depuradoras, convence al auditorio de la necesidad del pabellón polideportivo en Puebla, exige que los exámenes de Selectividad vuelvan a celebrarse en Sanabria o recuerda al Partido Popular que no han cumplido el compromiso de arreglar la carretera de Porto o el trazado de la Baña.

Nunca he visto a un procurador del Partido Popular defender un solo proyecto para Sanabria ni para la Carballeda, a Felipe en muchas ocasiones.

Cuando veo su escaño vacío sé que está cumpliendo con sus tareas como profesor de matemáticas en el Instituto, tareas que siempre antepone para no faltar a clase si no tiene la obligación de intervenir. Cuando tenemos encuentros del grupo de procuradores en otras provincias Felipe no asiste por no dejar sus obligaciones escolares. Organizamos las reuniones, las ruedas de prensa o prepararnos iniciativas siempre por la tarde o los fines de semana. Esto demuestra la seriedad y la honestidad de un parlamentario regional, elegido democráticamente por los zamoranos que cumple con sus responsabilidades.

Para juzgar a las personas yo siempre me fío de los hechos, del tiempo que la gente dedica a tareas que tienen que ver con las necesidades sociales, del interés que demuestran por los temas que afectan a la comunidad, del tiempo que regalan a pelear por su tierra y por sus gentes y Felipe no sólo me ha demostrado que siempre ha tenido esas inquietudes sino que ha colaborado activamente en el desarrollo social, cultural y económico de la comarca de Sanabria. Felipe Lubián ha demostrado con hechos su generosidad, su honestidad, su coherencia y la defensa permanente de su tierra.

Como persona que conozco bien a la sociedad zamorana, al señor Delfín no le conozco ninguna de esas cualidades, no recuerdo ni un solo hecho que le acerque a esas características. En las múltiples visitas que he realizado con mis alumnos, como profesor de ciencias naturales, para que conozcan el rico ecosistema sanabrés, siempre les he demostrado que la introducción de especies raras en los ecosistemas perjudica gravemente la estabilidad que estos necesitan. Basta recordar los ejemplos del cangrejo americano, del lucio o del mejillón cebra y, en Sanabria, la aparición del delfín con aguijón, con veneno en sus arterias, se está convirtiendo en un problema medioambiental de primera magnitud.

* Procurador del PSOE por Zamora

Artículo publicado en La Opinión de Zamora el 11-12-2006

La réplica a este artículo, en el mismo diario, el 13-13-2006, por Delfín Rodríguez.

Sobre este polémica, ver el artículo de hoy 15-12-2006 de José Manuel Anta Anta.