La polis

Maíllo: Líder de masas (II)
por Jesús Cuadrado

Una de las cosas que más me impactan de este novel jefe de Zamora es su facilidad para la promoción de titulares de prensa. Fugaces, pero titulares. No se para en gastos que, y se comprende, le encantan al medio de comunicación al que le beneficia la generosidad del presidente. Que el bautizo se pague con dinero de usted, de usted y de usted, es sólo una puñetera circunstancia.
Maíllo en Portugal, Maíllo en Galicia, Maillo monta en burro, Maíllo se pone el casco de seguridad, Maíllo besa a un niño en Cuba. ¿Maíllo repara la carretera de Villalobos? Eso es prosa; Maíllo es poeta. Atentos a la habilidad de este aspirante a chamán zamorano. Si, por abandono, tienden a desaparecer 3.000 kilómetros de carreteras de su competencia, él dice que va sacar a los zamoranos en manifestación contra Zapatero. Un líder. Si le aburren sus obligaciones en las obras de infraestructuras en los pueblos, él se dedica a la agricultura ecológica que es competencia de otros, de los de Valladolid en concreto. Las relaciones internacionales, como los viajes a Cuba, le motivan más que sus responsabilidades sobre la recogida de basura en la provincia. Se entiende. El problema es qué hacemos con Zamora.
Se lo tengo dicho a uno de sus mentores. El chico se os va de la mano. Que hagan algo.

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