Varios comerciantes del centro se manifiestan en el Pleno
LA CORPORACIÓN APROBÓ DOS ORDENANZAS REGULADORAS
Una treintena de personas silbó a la salida a los concejales socialistas
Redacción
El Pleno del Ayuntamiento de Benavente, celebrado en la tarde noche de ayer, tuvo de protagonistas a unas sesenta personas (entre ellas titulares y familiares de establecimientos de la zona centro) que, con pancartas en mano, protestaban por la decisión municipal de despejar el centro de vehículos de la Plaza Mayor y por ampliar la zona azul a tres calles y una plaza de la ciudad.
El alcalde tuvo que hacer varias llamadas al orden, solicitando que el público se abstuviera de hacer comentarios y manifestaciones. Estos parecieron amainar unos minutos, cuando nuevamente el alcalde argumentó que los 17 concejales, reunidos en ese momento, merecían un respeto, por cuanto estaban reunidos en Pleno, la reunión solemne de la Corporación, como representantes de la ciudadanía. Fue un espejismo. A lo largo de los debates, se sucedieron nuevas intervenciones de entre el público, con voces altas y sonoras, que interrumpían el turno de los que tomaban la palabra. El alcalde recordó que no quería tener que desalojar la sala: "ese espectáculo que buscan no se lo voy a dar". Algunos de los asistentes parecían precisamente buscar el desalojo, pues decían a media voz “eso, a ver si nos echa”; otra parte del público asistente, recriminó esta actitud a sus compañeros y el pleno siguió su curso, aunque hubo ocasiones que algunos de los presentes profirieran frases en voz alta, dirigidas al equipo de gobierno.
La primera de las ordenanzas que se debatía sobre vados o reserva de espacios en la vía pública fue aprobada por diez votos a favor (los del equipo de gobierno y los del concejal Ángel Cachón) y siete abstenciones (las del Partido Popular).
El concejal del PP, que reconoció que por vez primera se regulaban los vados con la presente ordenanza objeto de debate, renegó de lo que habían hecho los anteriores equipos de gobierno de su partido, al contestar a Tomás Omañas. El concejal socialista recordó que en 16 años no había habido una regulación de los vados. Entonces, en el turno de réplica, el portavoz del Partido Popular dijo: “No me importa lo que hicieron los anteriores equipos de gobierno”, en relación a su partido.
Una treintena de personas silbó a la salida a los concejales socialistas
Redacción
El Pleno del Ayuntamiento de Benavente, celebrado en la tarde noche de ayer, tuvo de protagonistas a unas sesenta personas (entre ellas titulares y familiares de establecimientos de la zona centro) que, con pancartas en mano, protestaban por la decisión municipal de despejar el centro de vehículos de la Plaza Mayor y por ampliar la zona azul a tres calles y una plaza de la ciudad.
El alcalde tuvo que hacer varias llamadas al orden, solicitando que el público se abstuviera de hacer comentarios y manifestaciones. Estos parecieron amainar unos minutos, cuando nuevamente el alcalde argumentó que los 17 concejales, reunidos en ese momento, merecían un respeto, por cuanto estaban reunidos en Pleno, la reunión solemne de la Corporación, como representantes de la ciudadanía. Fue un espejismo. A lo largo de los debates, se sucedieron nuevas intervenciones de entre el público, con voces altas y sonoras, que interrumpían el turno de los que tomaban la palabra. El alcalde recordó que no quería tener que desalojar la sala: "ese espectáculo que buscan no se lo voy a dar". Algunos de los asistentes parecían precisamente buscar el desalojo, pues decían a media voz “eso, a ver si nos echa”; otra parte del público asistente, recriminó esta actitud a sus compañeros y el pleno siguió su curso, aunque hubo ocasiones que algunos de los presentes profirieran frases en voz alta, dirigidas al equipo de gobierno.
La primera de las ordenanzas que se debatía sobre vados o reserva de espacios en la vía pública fue aprobada por diez votos a favor (los del equipo de gobierno y los del concejal Ángel Cachón) y siete abstenciones (las del Partido Popular).
El concejal del PP, que reconoció que por vez primera se regulaban los vados con la presente ordenanza objeto de debate, renegó de lo que habían hecho los anteriores equipos de gobierno de su partido, al contestar a Tomás Omañas. El concejal socialista recordó que en 16 años no había habido una regulación de los vados. Entonces, en el turno de réplica, el portavoz del Partido Popular dijo: “No me importa lo que hicieron los anteriores equipos de gobierno”, en relación a su partido.
El concejal Ángel Cachón renunció a su turno de debate, porque dijo que "el circo estaba montado".
Oportunismo político
En el siguiente punto, cuando se debatía la ordenanza del tráfico, aparcamiento, vías públicas y seguridad vial, el portavoz del PP quiso justificar por qué en tiempo y forma no habían presentado ninguna alegación a las ordenanzas. Sin embargo, dijo que los “debido a las circunstancias últimas”, en referencia a las demandas de parte del colectivo de comerciantes del centro, y pidió que “por interés público” se modificara ahora la ordenanza. “Hay posibilidad para negociar con la empresa adjudicataria de la ORA lo que demandan los comerciantes”, dijo. Y añadió: “Este Ayuntamiento parece la tómbola de los hermanos Cachichi. Están cambiando cacerolas por pucheros” (sic).
En el turno de réplica, el concejal Tomás Omañas, recordó a Vega que la ordenanza reguladora del servicio de ordenación y regulación del estacionamiento de vehículos, fue publicado en el Boletín Oficial de la Provincia el lunes 3 de febrero de 2003, cuando gobernaba el Ayuntamiento el Partido Popular. En dicha ordenanza se contemplaba el área de aplicación de la zona azul, entre las que se encontraban, la Plaza de San Martín y las calles San Antón, Ledo del Pozo y Venezuela (hoy Las Eras), precisamente las calles objeto de la reclamación que ahora hacen comerciantes de la zona centro.
Por ello, el concejal Tomás Omañas acusó al portavoz del PP de sobreactuar con “oportunismo político”.
La nueva ordenanza salió a favor con los nueve votos de los concejales socialistas y la abstención de los ocho concejales de la oposición. El PP presentó una moción de urgencia para que el Ayuntamiento renegociara con la empresa Dornier el estacionamiento, moción que no salió adelante.
Tras la votación, buena parte de los asistentes abandó el pleno entre gritos. El coordinador del Partido Popular y ex concejal, José Luís Tesón, presente entre el público, se levantó de su asiento e hizo un llamamiento a los asistentes a que se quedaran, pues sus compañeros del PP iban a presentar ruegos y preguntas. Sólo quedó una decena de personas. Desde el vestíbulo se oían voces y pitadas con silbatos.
Acabado el pleno, una treintena de manifestantes increpó la salida de los concejales socialistas, con abucheos, tocando silbatos y recordando a gritos las elecciones.
Oportunismo político
En el siguiente punto, cuando se debatía la ordenanza del tráfico, aparcamiento, vías públicas y seguridad vial, el portavoz del PP quiso justificar por qué en tiempo y forma no habían presentado ninguna alegación a las ordenanzas. Sin embargo, dijo que los “debido a las circunstancias últimas”, en referencia a las demandas de parte del colectivo de comerciantes del centro, y pidió que “por interés público” se modificara ahora la ordenanza. “Hay posibilidad para negociar con la empresa adjudicataria de la ORA lo que demandan los comerciantes”, dijo. Y añadió: “Este Ayuntamiento parece la tómbola de los hermanos Cachichi. Están cambiando cacerolas por pucheros” (sic).
En el turno de réplica, el concejal Tomás Omañas, recordó a Vega que la ordenanza reguladora del servicio de ordenación y regulación del estacionamiento de vehículos, fue publicado en el Boletín Oficial de la Provincia el lunes 3 de febrero de 2003, cuando gobernaba el Ayuntamiento el Partido Popular. En dicha ordenanza se contemplaba el área de aplicación de la zona azul, entre las que se encontraban, la Plaza de San Martín y las calles San Antón, Ledo del Pozo y Venezuela (hoy Las Eras), precisamente las calles objeto de la reclamación que ahora hacen comerciantes de la zona centro.
Por ello, el concejal Tomás Omañas acusó al portavoz del PP de sobreactuar con “oportunismo político”.
La nueva ordenanza salió a favor con los nueve votos de los concejales socialistas y la abstención de los ocho concejales de la oposición. El PP presentó una moción de urgencia para que el Ayuntamiento renegociara con la empresa Dornier el estacionamiento, moción que no salió adelante.
Tras la votación, buena parte de los asistentes abandó el pleno entre gritos. El coordinador del Partido Popular y ex concejal, José Luís Tesón, presente entre el público, se levantó de su asiento e hizo un llamamiento a los asistentes a que se quedaran, pues sus compañeros del PP iban a presentar ruegos y preguntas. Sólo quedó una decena de personas. Desde el vestíbulo se oían voces y pitadas con silbatos.
Acabado el pleno, una treintena de manifestantes increpó la salida de los concejales socialistas, con abucheos, tocando silbatos y recordando a gritos las elecciones.
Fotos: Arriba, manifestantes en el Pleno de ayer. Abajo, parte del público asistente: en primer término el ex concejal popular Román Ávila y el coordinador del PP, José Luís Tesón.
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