Valle de Vidriales

PIDEN LA RESTAURACIÓN DEL SANTUARIO DE ROSINOS DE VIDRIALES
Los procuradores socialistas señalan el mal estado del edificio
Redacción

Los procuradores socialistas por la provincia de Zamora, José Ignacio Martín Benito, Ana Sánchez Hernández y Manuel Fuentes López han presentado a la mesa de las Cortes una Proposición No de Ley por la que quieren instar a la consejería de Fomento, a través del programa "Arquimilenios", a que se restaure el santuario de Nuestra Señora del Valle, en Rosinos de Vidriales.

El santuario
El santuario de Nuestra Señora del Campo está enclavado en un área de especial interés. Próximo a la carretera entre La Bañeza y Camarzana, en el llano, bajo los pies del castro de Sansueña y en las inmediaciones del campamento romano de Petavonium, que albergó a la Legio X Gemina y al Ala II Flavia Hispanorum Civium Romanorum.
En esta ermita se guardó la imagen románica de Nuestra Señora del Campo, patrona del valle, hasta su desaparición a finales de los años sesenta del pasado siglo y su sustitución por una réplica. En el lugar se celebra el 8 de septiembre la antigua romería en la que partipaban los vecinos de Morales de Rey, Santa María de la Vega (Verdenosa), Quiruelas de Vidriales, Brime de Urz, Cubo de Benavente, San Pedro de Ceque, Rosinos de Vidriales, Santibáñez, Uña de Quintana, Tardemézar, Fuenteencalada, Moratones, Granucillo y otros pueblos del valle de Vidriales.
En la explanada del santuario se ha venido celebrando también una feria agrícola y de productos de la tierra.
El edificio actual fue construido en 1750, con fábrica de mampostería en cuarcita, salvo las esquinas y marcos de vanos, donde se utilizó el sillar. Hacia 1883 se sustituyó el pórtico de la portada sur por una galería de columnas. Con posterioridad se adosó al edificio una preceptoría, cuyos muros fueron derribados a finales de los ochenta del pasado siglo.
El campanario es una torre cuadrada, esbelta, situada a los pies del templo, de tres cuerpos. En el primero, se abre, bajo arco de medio punto, tres puertas, a modo de atrio. El segundo cuerpo es más compacto, tan sólo abierto por una pequeña ventana cuadrada hacia poniente y ya el tercero o superior se aligera con cuatro vanos, uno por cada lado, para colocar las campanas. El estado de conservación es preocupante, sobre todo por algunas grietas o fisuras que corren verticalmente la torre, así como otras partes de la misma, en especial la clave del arco occidental del campanario, que amenaza con desprenderse.
Los alcaldes del valle de Vidriales y rectores del santuario han mantenido reuniones al objeto de abordar la reparación del edificio e impulsar la tradicional romería.

Foto: Santuario de Nuestra Señora del Campo, en Rosinos de Vidriales.