Músicos, mercaderes y cómicos
EL RENACIMIENTO EN BENAVENTE
Numeroso público llegó, compró y degustó
Redacción
El pasado fin de semana La Encomienda y la Plaza Mayor se engalanaron de banderas y estandartes, de toldos y mercancías, de tabernas, de dulces y de hierbas medicinales. Benavente por unos días volvió al Renacimiento, rememorando un zoco del siglo XVI.
Músicos, malabaristas, pícaros y danzantes, junto con artesanos y vendedores ambulantes llenaron la calle de aromas de otro tiempo.
Este año la ciudad, con motivo de la celebración del V Centenario de la Concordia Villafáfila, cambió la Edad Media por el Renacimiento. La inauguración tuvo lugar la tarde del viernes, en la que el alcalde, con buen humor, acompañado del carro de los cómicos, se encargó de dar la bienvenida y de desear un buen mercado.
Juegos para los niños, reatas de borricos, una exposición de instrumentos de tortura y otra de cetrería animaron las entoldadas calles, con música de gaitas de fuelle y danzas del vientre.
Entre los puestos, venta de collares, de adornos de plata vidrio, de mantas del Bodón (Salamanca), de espadas y sables, objetos de cuero, de madera, calígrafos árabes, libros en miniatura. El mercado renacentista cierra así la primera semana de agosto del Verano Activo.
Numeroso público llegó, compró y degustó
Redacción
El pasado fin de semana La Encomienda y la Plaza Mayor se engalanaron de banderas y estandartes, de toldos y mercancías, de tabernas, de dulces y de hierbas medicinales. Benavente por unos días volvió al Renacimiento, rememorando un zoco del siglo XVI.
Músicos, malabaristas, pícaros y danzantes, junto con artesanos y vendedores ambulantes llenaron la calle de aromas de otro tiempo.
Este año la ciudad, con motivo de la celebración del V Centenario de la Concordia Villafáfila, cambió la Edad Media por el Renacimiento. La inauguración tuvo lugar la tarde del viernes, en la que el alcalde, con buen humor, acompañado del carro de los cómicos, se encargó de dar la bienvenida y de desear un buen mercado.
Juegos para los niños, reatas de borricos, una exposición de instrumentos de tortura y otra de cetrería animaron las entoldadas calles, con música de gaitas de fuelle y danzas del vientre.
Entre los puestos, venta de collares, de adornos de plata vidrio, de mantas del Bodón (Salamanca), de espadas y sables, objetos de cuero, de madera, calígrafos árabes, libros en miniatura. El mercado renacentista cierra así la primera semana de agosto del Verano Activo.
Fotos: Cómicos en la inauguración del Mercado Renacentista el pasado viernes.
<< Home